caudillo psc

El giro a la izquierda en Carchi: Nuevos espacios de lucha en la Frontera Norte

Carolina Alvarez red kapari

Tras diez años en la alcaldía de Tulcán, el conservador Julio Robles lanzó su candidatura a la Prefectura de Carchi, en alianza con los socialcristianos de Jaime Nebot. Con este pacto estratégico, Robles dio por sentada su victoria, y centró su campaña en generar lazos clientelares que le garantizasen un voto masivo. Sin embargo, no fue todo como esperaba.

El comicio electoral del pasado 24 de marzo trajo consigo nuevos vientos a nivel cantonal y provincial. El pueblo fue llamado a las urnas para elegir, a través del voto democrático, quiénes serían sus representantes a nivel local. En este contexto, Carchi no fue la excepción. Tras diez años en la alcaldía de Tulcán, la capital carchense, Julio Robles, cabeza visible del Movimiento Social Conservador (MSC), trató de controlar, también, la provincia tras pactar con el Partido Social Cristiano (PSC) y su histórico líder, Jaime Nebot. Con esta alianza estratégica, Robles dio por sentado su triunfo y su campaña se centró, como siempre, en generar lazos clientelares que garantizasen una dinámica de voto masivo al puro estilo del biopoder: cambiar obras por papeletas.

En esta campaña de “pan y norteño” para el pueblo, Robles arrastró al también conservador Andrés Ruano, quien optaba a sucederle en la alcaldía tulcaneña. Sus simpatizantes escoltaron las caravanas de propaganda, en las que también estuvo presente Nebot. Ambos -Robles y Ruano- se fotografiaron, saludaron y besaron al guayaquileño, personificando a la perfección el rol de súbditos que entregan a su majestad una fiesta cortesana. Banderas azul conservador se concentraron en una Plaza Central de Tulcán embriagada de poder.

jaime nebot

Sin embargo, no fue todo como se esperaba: los sectores populares salieron a las calles con pancartas en protesta por la visita de Nebot, increpado, entre otras cosas, por los crímenes de lesa humanidad que pesan en su contra, como el asesinato en 1985 de la carchense Consuelo Benavides. Refresquemos nuestra memoria: Nebot fue designado por León Febres Cordero como gobernador del Guayas bajo lemas que giraban alrededor de la “limpieza social” de guerrilleros e izquierdistas. Cabe destacar que Robles y Ruano hicieron todo lo posible por apagar las voces de la oposición, y mandaron a sus “gorilas” a arrancar los carteles críticos que se agolparon al paso de la caravana.

Luego de este suceso, el MSC continuó su campaña limosnera. Robles acompañó a su correligionaria y alcaldesa encargada de Tulcán, Sonia Vaca, a la inauguración de obras inconclusas durante el silencio electoral, y esperó con los brazos cruzados y la copa de champán en la mano el triunfo que, según sus predicciones, lograría al día siguiente. Su obnubilada mirada no le permitió percibir que las bases populares ya caminaban en otro sentido.

Cristian Benavides, candidato por el partido Somos, dio un golpe bajo a la maquinaria política carchense y a la derecha ecuatoriana y desmoronó la agónica vida que le quedaba al MSC. Benavides centró su campaña en la visita barrial, a estar a pie de calle y en la casa comunal, prefirió la minga como forma de organización social, y llamó a la conciencia política y un voto de cambio, además de poner en la mesa pública el debate sobre la cultura y la memoria histórica. El candidato hablaba con experiencia: sacó a flote la evidente corrupción conservadora, e hizo de su discurso la apropiación de una denuncia popular.

El 24 de marzo Benavides recibió la noticia de ser electo como nuevo alcalde de Tulcán con un 33,32% frente a un 22,94% que prefirió a Ruano. Y Guillermo Herrera, representante de la Izquierda Democrática, ganó la Prefectura con un avasallador 61,35%, por un 35,49% que obtuvo Julio Robles. Así, la política para Tulcán y Carchi comenzó a pintarse con otros rostros, después de diez oscuros años de conservadurismo. Carchi fragua nuevos tiempos.

caudillo psc 6

Published by

Kapari Comunicación

Red de Comunicación Comunitaria Ecuador